Este libro escrito por uno de los egiptólogos de nuestro equipo, pertenece a una colección llamada "EL BIBLIOTECARIO DE ALEJANDRÍA". Son novelas históricas que toman como referencia hechos reales confirmados por documentación hallada tanto en papiros como en diversas inscripciones.
Como si de una cadena de ADN incompleta se tratase, el autor rellena con criterio histórico las lagunas que las fuentes fidedignas nos proporcionan.
Podrán disfrutar de una historia de lecturura fascinate, que te atrpará desde principio a fin.
En la III dinastía, destacada por los avances que se produjeron en muchos ámbitos de la ciencia, aparecen dos personajes cuya memoria aún perdura.
Uno de ellos, el faraón Zóser, fue quien encargó uno de los monumentos más emblemáticos entre todas las construcciones que hoy podemos admirar en el país, antaño conocido como el de la tierra negra, y que hoy llamamos Egipto, la pirámide escalonada de Sakara.
Fue el primer edificio que se construyó en piedra en toda la historia. Pero no fue solamente la pirámide, sino todo el complejo funerario, lo que se levantó con un material que jamás se había utilizado para tales fines y del cual se desconocía por completo el tratamiento, el comportamiento, ni tan siquiera, el modo de trabajarlo.
Y el artífice de tan gran obra fue nuestro personaje protagonista de esta increíble historia, Imhotep. Destacó, como es evidente, en arquitectura e ingeniería. Pero también lo hizo en el resto de ciencias conocidas. Tanto es así que, en época faraónica, se le llegó a considerar hijo de los dioses, componente de la triada de Menfis, cuyos padres eran Ptah y Sekhmet, asimilándole con Nefertum, quien simbolizaba el renacer.
Desde niño destaca sobre el resto de jóvenes de su edad y es instruido en diversas ciencias. Tal es su capacidad intelectual e ingenio que llegó a acumular innumerables títulos otorgados por el faraón con quien compartiría inmortalidad. El nombre de ambos, unidos con un vínculo inquebrantable, nos transporta a una edad de oro que, junto con la IV dinastía, revolucionaría la arquitectura.
De la historia de estos personajes apenas se tiene documentación, pero sí de sus obras y logros, por lo que, en lo concerniente a su vida privada que en esta obra se relata, es totalmente creación del autor.
Obras y tratados legados por Imhotep, además de la mayoría de personajes principales, se encuentran referenciados en documentos de la época que nos ocupa.
Una novela histórica y una obra de divulgación, llena de dinamismo y de intrigas, conspiraciones y traiciones, con fichas complementarias que ayudan al lector a conocer y comprender un modelo social equiparable, en muchos aspectos, a nuestro sistema de vida, a pesar de la inmensa diferencia temporal.
